Amada no quiere salir de casa.
No es miedo, no es pereza… es hastío.
La ciudad ruge ahí afuera con sus prisas, sus reglas absurdas, su manía de decirnos cómo tenemos que ser, vestir, pensar.
Pero hoy, en su azotea, entre la ropa tendida y agitada por el viento, Amada se da el permiso de hablar. Y no habla sola. Está Mari, su vecina, su amiga, su cómplice.
Con ella se indigna, se ríe, recuerda.
Pero hay algo más: están ellas. Las que vinieron antes. Las que la criaron, la cuidaron, la enseñaron a mirar el mundo con otros ojos.
Siete delantales cuelgan en el tendal.
Siete mujeres que aún viven en su piel.
Amada se deja habitar por ellas: su yaya Mercè, la tía que siempre tenía una copla en los labios, la vecina que cosía historias mientras arreglaba la ropa… Y así, entre recuerdos y gestos prestados, nos lleva a la Barcelona de los años 50 a los 80, donde estas mujeres tejieron una red de afecto, de resistencia, de sabiduría compartida.
Porque, aunque el mundo parezca cada vez más frío y más hostil, hay algo que Amada tiene claro:
la vida se vive mejor en tribu. Y hoy, aquí, nos invita a formar parte de la suyo.
Ángela Palacios, de la obra “brillante como la fruta madura”
Os recomiendo fuertemente ir a verla o seguir a Ángela, que también actúa fuera de Barcelona.
A mí me llegó dentro muy dentro.
Volvería con una libretita a apuntar todas las frases que la prota va diciendo.
No puedo añadir nada mejor.
Se lo dedico a mi tribu, ellas saben quienes son. ❤️
Hasta el próximo domingo,
Raquel
P.D. Perdón, el link!
https://es.teatrebarcelona.com/espectaculo/brillante-como-la-fruta-madura
P.D.2. Seguimos haciendo tribu;
taller yin yoga verano: viernes 13 de junio de 17 a 19 h
intensivo yin yoga: del 2 al 6 de agosto
como un retiro urbano, no se me ocurre mejor plan de vacaciones ;)